Se situaba en las inmediaciones del arsenal, en el único terreno firme que podían ocupar los enemigos. Contaba con 4 baterías unidas por un parapeto con banqueta para fusilería que formaban un recinto irregular hecho con salchichones y barricas llenas de fango. Las baterías batían el espacio entre el caño, el camino de Puerto Real, el caño de la Cruz y La Carraca.
Era un punto intermedio, el más a propósito para unir el centro de la línea con la izquierda, objetivo que se tuvo en cuenta fortificando según su importancia. Era por sí sola capaz de una buena defensa. Estaba bien dotada de blindajes y repuestos de municiones y artillada con ocho piezas de 24, doce de 18, dos de 8 y tres obuses de a 9. Al mismo tiempo favorece la defensa de la línea exterior y en caso de ser rota contendría el avance enemigo y aún podría dar sostener operaciones hasta reducir al enemigo a sus anteriores posiciones.